Libros infantiles- ¿Por qué leer cuentos a los niños?
Los cuentos son poderosos, mágicos y sanadores. Los cuentos nos transportan, nos mueven y nos alimentan el alma.
A través de los cuentos, los niños viven la voz humana y el lenguaje, educan el oído y la escucha, observan los gestos y expresiones de la cara del narrador. Vivir el cuento en compañía produce en el niño bienestar y confianza en el entorno.
Los cuentos acogidos de esta forma influyen hasta físicamente. A menudo se puede observar cómo las mejillas de los niños se ponen rojas y, al terminar el cuento, se levantan como después de haber dormido la siesta, irradiando sosiego y bienestar.
Las imágenes recibidas de los cuentos vivirán como semillas morales dentro de ellos, permitiéndoles conocer valores humanos que están en disposición de desarrollar.
También se educa y enriquece el lenguaje y se estimula el desarrollo de las fuerzas de la fantasía y de la imaginación, capacidades necesarias para el aprendizaje en la escuela. Los cuentos vivos son un bálsamo contra la televisión y otros medios de comunicación.
El arte de la narración es parte de nosotros, es una habilidad y una necesidad humana. Los relatos se han utilizado desde la antigüedad, permitiendo transferir conocimientos, valores, educando… Dando un sentimiento de pertenencia, identidad, fortaleciendo nuestras raíces y nuestro transitar en esta vida.
Por todas estas razones, el cuento es un elemento muy valioso presente en el día a día.
A través de los cuentos, los niños viven la voz humana y el lenguaje, educan el oído y la escucha, observan los gestos y expresiones de la cara del narrador. Vivir el cuento en compañía produce en el niño bienestar y confianza en el entorno.
Los cuentos acogidos de esta forma influyen hasta físicamente. A menudo se puede observar cómo las mejillas de los niños se ponen rojas y, al terminar el cuento, se levantan como después de haber dormido la siesta, irradiando sosiego y bienestar.
Las imágenes recibidas de los cuentos vivirán como semillas morales dentro de ellos, permitiéndoles conocer valores humanos que están en disposición de desarrollar.
También se educa y enriquece el lenguaje y se estimula el desarrollo de las fuerzas de la fantasía y de la imaginación, capacidades necesarias para el aprendizaje en la escuela. Los cuentos vivos son un bálsamo contra la televisión y otros medios de comunicación.
El arte de la narración es parte de nosotros, es una habilidad y una necesidad humana. Los relatos se han utilizado desde la antigüedad, permitiendo transferir conocimientos, valores, educando… Dando un sentimiento de pertenencia, identidad, fortaleciendo nuestras raíces y nuestro transitar en esta vida.
Por todas estas razones, el cuento es un elemento muy valioso presente en el día a día.
Fuente: Heidi Bieler (2018). Cuentos para chiquitines. Ed. Antroposófica.
citado de : https://web.facebook.com/EscuelaRaicesWaldorf